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Martes 23 de Septiembre del 2025
Cristo padeció, para llevarnos a Dios. 1 Pedro 3, encierra 22 versos cargados de sabias y edificantes palabras el cual podemos dividirlo en tres secciones:
1. (v1-12) Deberes conyugales, vida piadosa en el hogar y la iglesia.
2. (v13-17) Vida piadosa ante el mundo por causa de la justicia.
3. (v18-22) El sufrimiento vicario de Cristo.
El apóstol Pedro, era un hombre casado, recuerden que una ocasión Jesús sanó a su suegra (V+ Mt 8:14-34; Lc 4:38–39); el empieza este capítulo “… mujeres, estad sujetas a vuestros maridos” (v1a) con el fin del que “no cree a la palabra, sean ganados sin palabras por la conducta de sus esposas,” (v1b); enseñando mas sobre sus vestiduras, las cuales resalta las internas, las del corazón por encima de las externas (V+ v3-4), poniendo ejemplo como a Sara (V+ v6). También le habla a los “…maridos, igualmente vivir con ellas sabiamente”, “para que vuestras oraciones no tengan estorbo” (V+ v7); guiándonos a “… sed todos de un mismo sentir, compasivos, amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables; no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición.” (v8-9, V+ v10-12).
Cristo padeció, para llevarnos a Dios. En la sección dos (s2, v13-17), nos garantiza que nadie nos podrá hacer daño, si seguimos el bien (V+ v13; Pr 16:7; R. 8:31-39), y si padecemos haciendo el bien, somos bienaventurados (V+ v14a), al ser voluntad de Dios querer o permitirlo (V+17). Llevándonos posteriormente a la sección tres (s3, v18-22) la cual nos trae el verso principal de esta reflexión, veamos:
* (v18) “Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu;”
Cristo padeció, para llevarnos a Dios. No seas desobediente, hoy es día de salvación, Dios ha sido paciente, hace más de 2000 años, el envío a su hijo, no para pasear en la tierra, ni disfrutar de ella, sino a morir y padecer por ti, para llevarte a Dios. Cristo padeció, para llevarnos a Dios. Él es “el camino, la verdad y la vida.” (Jn 14:6). Mira el ejemplo que pone Pedro “en el cual también fue y predicó a los espíritus encarcelados, los que en otro tiempo desobedecieron, cuando una vez esperaba la paciencia de Dios en los días de Noé, mientras se preparaba el arca, en la cual pocas personas, es decir, ocho, fueron salvadas por agua.” (v19-20; comp 1:10-12). Mira como dice: “cuando una vez esperaba la paciencia de Dios en los días de Noé, mientras se preparaba el arca” Se estima que Noé haya construido el arca aproximadamente entre 50-75 años, no mas de 100 años, debido que Noé tenía 500 años cuando nacieron sus hijos (Sem, Cam y Jafet) y Noé entró en el arca a los 600 años ya con sus hijos adultos y casados (los cuales seguramente fueron su principal ayuda) para ser esta gran obra. Cristo padeció, para llevarnos a Dios. Cuidado no se te acabe el tiempo. Él es paciente, pero su palabra se cumple en su tiempo. Cristo padeció, para llevarnos a Dios. Cristo es nuestra arca, nuestra salvación. Busca tener una buena conciencia ante Dios. Sigue el bien, como menciona Pedro: “¿Y quién es aquel que os podrá hacer daño, si vosotros seguís el bien?” (v13). Dios te bendiga es mi deseo. 1 Pedro 3:18